Mientras se pronuncia el comité disciplinario de la Dimayor sobre el polémico final del partido entre Llaneros y Unión Magdalena, las reacciones van en aumento. En general coinciden en que los jugadores del equipo de Villavicencio se quedaron quietos para que Unión anotara el segundo gol que le valió el ascenso a la categoría A del fútbol profesional colombiano.
Sin embargo, el técnico de Llaneros, Walter Aristizábal, explicó que “después de ir ganando, cuando nos empatan fue fatal anímicamente. Teníamos que salir a hacer cinco goles y ya estaba perdido».
A su turno, el presidente del club, Juan Carlos Trujillo, aseguró que no hubo plata de por medio y que los jugadores querían ganar. “Estaban destrozados; cuando bajé a la cancha, todos estaban llorando”.
Por su parte, el ministro del Deporte, Guillermo Herrera Castaño, dijo que hoy mismo radicará en la Fiscalía una solicitud para que se investigue el caso y rechazó la opción de repetir el partido entre Llaneros y Unión Magdalena.
El gobernador del Meta, Juan Guillermo Zuluaga, quien apoyó económicamente al equipo, anunció que “se tomarán decisiones acordes con este episodio”.